Quienes desarrollan su actividad laboral fuera de la oficina se encuentran siempre con el mismo problema. Apostar por un netbook puede ser una de las mejores opciones. Poco peso, teclado QWERTY físico, manejabilidad… La otra opción es hacerse con un tablet, más ligero todavía, con pantalla táctil aunque menor capacidad de almacenamiento integrada y, generalmente, más caros. Elegido uno u otro dispositivo, siempre se echarán en falta algunas características del equipo descartado. Gigabyte tiene la solución final.

La solución planteada por
Gigabyte para esta clase de usuarios
integra en una sóla máquina las
virtudes de ambas. El netbook T1005 viene
con una interesante pantalla multitáctil capacitiva gracias a la cual se puede pasar de trabajar en un netbook a hacerlo en un tablet en cuestión de segundos. Tan sólo hay que girar su
brazo articulado y apoyar la parte trasera de la pantalla
sobre el teclado. Una propuesta ideal para aquellos que
durante la jornada laboral tienen la obligación de moverse de un sitio a otro y negociar con clientes mediante presentaciones
en PPT, Excel o vídeos y después, al llegar a la oficina,
deben escribir el informe correspondiente. Será tan sencillo como volver a girar la pantalla y comenzar a teclear. Además, viene con una configuración de serie mucho más
potente que otros netbooks, con un procesador Intel Atom Dual Core N570 a 1.66
GHz (doble núcleo), 2GB de RAM y un
disco duro de 250 GB de capacidad.

Conectividad

Uno de los puntos fuertes del equipo es la conectividad.
Dispone de un puerto USB 2.0 y otro 3.0 para transferir
archivos vía cable a la mayor velocidad posible que brinda este estándar (supera en nada menos que 10 veces los tiempos de la versión 2.0). También cuenta con un puerto e SATA, RJ45, entrada de micrófono, salida de auriculares, lector de tarjetas 4 en 1 y una conexión VGA. Es cierto que
no incluye puerto HDMI, algo que podría echarse en falta
si el usuario al que se dirigiera estuviera más centrado en
las funciones multimedia, pero no es el caso.
La pantalla, el elemento en el que el equipo de Gigabyte se
la ha jugado el todo por el todo, tiene un tamaño de 10,1 pulgadas, y atesora
una calidad de 1366x768 píxeles. Se apoya, para programas con altos requerimientos
de imagen, en una tarjeta gráfica Intel GMA 3150.
Las conexiones a Internet se pueden realizar vía Wifi, para lo cual incorpora un
chip con el protocolo 802.11 b/g/n, o también a través de su módulo para conexiones
móviles 3,5G integrado (opción que se puede o no añadir a la configuración
del equipo). Además, dispone de Bluetooth para conectar accesorios con
este protocolo o intercambiar archivos de forma inalámbrica.
En cuanto al sistema operativo, puede trabajar sobre Windows 7 Starter o
Windows 7 Home. No es precisamente Windows la plataforma ideal para trabajar
pantallas táctiles, pero no es menos cierto que para interactuar con páginas
web, presentaciones o manejar el correo electrónico–uso para el que ha
sido concebido-, se maneja a la perfección.

Batería, pros y contras

La batería del equipo ha sido desarrollada en Litio-Ion y despliega seis celdas.
Lo positivo es que permite trabajar hasta seis horas y media de forma ininterrumpida,
lo negativo es que una parte de la misma sobresale por la parte trasera
del ordenador. Es algo que enturbia el diseño, ya de por sí muy básico,
del T1005. De todas formas y volviendo al mercado para el que ha sido desarrollado,
la versatilidad de la batería justifica el sacrificio estético.

Fácil acceso al disco duro y la memoria

El acceso al disco duro y la memoria RAM es muy sencillo. Cambiar cualquiera
de estos dos componentes es tan simple como desatornillar su tapa trasera,
extraer el hardware y conectar el nuevo. Es recomendable que este tipo de procesos
los lleve a cabo un profesional, pero pasado el periodo de garantía del
equipo cambiar los componentes puede ser una opción perfectamente asumible
por el usuario, algo que supondrá el ahorro de unos preciados euros en un
momento económico tan difícil como el actual.
El T1005 tiene un precio de 559 euros y, amén de incluir de serie el cable y
adaptador de alimentación, los drivers y un manual de uso –lo típico-, la caja
de venta al público viene con una bolsa de transporte para no tener que hacer
un desembolso extra al adquirirlo